En el Umbral de la Eternidad

En el Umbral de la Eternidad 1590 901 V.M. Kwen Khan Khu

Nunca antes un Maestro totalmente autorrealizado había publicado los procesos y experiencias que alguien de ese nivel vivencia tras terminar las Tres Montañas. Hoy, gracias a la generosidad y entrega a la humanidad del V.M. Kwen Khan Khu, tenemos en esta obra titulada En el umbral de la Eternidad la asombrosa dicha de poder conocer la vida interna y física, con sus fenómenos y procesos esotéricos, de alguien de ese nivel.

Este libro es una dádiva que la divinidad pone en nuestras manos para que, después de tener todo el camino hermético totalmente explicado y desvelado, además conozcamos lo que espera a las almas que alcancen el sagrado Anklad. Conocer cómo vive su Maestría alguien que alcanza esas alturas es un regalo realmente inmerecido que este sagrado Ser nos entrega para bien de nuestras almas y de las futuras humanidades.

Liberarnos de las leyes que nos atan a la existencia, en cualquiera de las dimensiones del espacio, es la tarea del llamado Camino Secreto al cual obedecen aquellos aguerridos valientes que lo dejan todo para encontrar el Todo… Así es, amigo lector, la verdadera libertad llegará a nuestras almas cuando hayamos comprendido, muy a fondo, la falsedad de eso que las multitudes llaman existir. El Gnosticismo contemporáneo, creado y liderado por el gran escritor, filósofo, místico y Maestro Samael Aun Weor, rasgó el velo de la mayávica ilusión que cubre esa vida monótona que tan solo lleva a los seres humanos de un extremo hacia otro, vale decir: de la cuna a la tumba.

Justamente, honorable lector, el solo sentido que tiene el hecho de existir en la Creación no es otro que alcanzar la emancipación de la Conciencia –como funcionalismo psíquico– para que ella se convierta en instrumento escrutador de eso que los filósofos llaman «la Verdad». Esa Verdad está subyacente en el interior de cada hombre y cada mujer y ansía, desde hace milenios, ser tomada en cuenta por el Anthropos intelectual.

El autor del tratado que tienes en tus manos consiguió allegarse a las recónditas regiones del Espíritu, y esto le permitió diferenciar claramente el tiempo como prisión del alma de eso otro que llamaríamos la eternidad, que ha de entenderse como liberación… Y esa fue la finalidad que en todo momento tuvo en cuenta el bienamado preceptor del autor, el V.M. Samael Aun Weor…….

Oremus.

«Negarse a asumir la responsabilidad de la individualización, resistirse a la Gnosis apelando a la terquedad del Ego, no es alcanzar la libertad sino persistir en el cautiverio. No somos libres para elegir nuestro destino, pero nuestra Gnosis, o conciencia, nos puede dar la libertad de aceptar este destino como una tarea que nos encomienda la ley del crecimiento espiritual».

Stephan Höeller