Las tres edades

Muy amados lectores y lectoras:

Os escribo para haceros llegar el presente grabado que lleva por título…

…LAS TRES EDADES

Originalmente, este grabado fue llamado Escudo de armas con una calavera,empero en verdad su significado va más allá de semejante descripción. El grabado fue obra del ilustre Albert Durero, pintor renacentista que vivió entre 1471 y 1528, y fue realizado en 1503.

Durero reformuló el tema del memento mori en una forma brillantemente inusual. La mujer vestida de fiesta es identificada por su corona como una novia, pero la persona que la abraza por detrás es un hombre salvaje. Esta figura tradicional del folclore alemán suele estar presente en las bodas, pero su escudo, invisible para la joven, revela que es un sustituto de la muerte.

Resulta interesantísimo ver a la mujer ataviada, engalanada con su vestimenta propia de la belleza de la juventud. Lleva rizos en su cabello y una corona maravillosa sobre su cabeza, pues bien es cierto que la juventud es la corona de nuestra existencia.

Detrás de ella observamos a un hombre salvaje que porta con él un cayado sobre el que se apoya. Esa es nuestra vejez, y la vejez siempre añora los tiempos de la juventud. De allí que se sienta atraído por la joven hermosa como queriéndola poseer.

Dicha doncella coge con una de sus manos ─la izquierda─ una cinta que brota de las alas que, por cierto, atraviesan el cayado por la parte superior del mismo. Esas son las alas de la inspiración, las alas de la imaginación creadora que no deberíamos nunca perder para siempre mantenernos en esa edad jovial dentro y fuera de nosotros.

El autor quiso que nosotros pudiéramos contemplar un yelmo y unas flores que rodean al mismo para darnos a entender que esos valores sagrados de la juventud deben ser defendidos a toda costa a fin de alejar de nosotros la muerte.

La parca aparece simbolizada en un escudo que reposa sobre un libro antiguo. Es el libro de la vida, el libro de nuestra vida. Algunos autores comentan que el ángulo del cráneo en el escudo es exactamente el de la cabeza de la joven…..

Podemos observar tres piedras en el suelo de este grabado. Tales piedras son la alegoría de la juventud, la madurez y la vejez.

El hombre salvaje que trata de abrazar a la joven de nuestro grabado tiene en verdad una apariencia desagradable. Es una apariencia que muestra el abandono, la suciedad, la degeneración de nuestro cuerpo cuando hemos permitido al mismo caer en brazos de la entropía y la dejadez.

Permitidme haceros llegar unas frases para la reflexión:

«La juventud siempre tiene la ilusión por alimento».
Descartes

«Los jóvenes son como las plantas: por los primeros frutos se ve lo que podemos esperar para el porvenir».
Demócrates

«Los deseos del joven muestran las virtudes futuras del hombre».
Cicerón

«¡Todo pasa en verdad, y la juventud más pronto que todo!».
Rubén Darío

«Se burlaron de un hombre entrado en años porque le gustaban las mujeres jóvenes. Es el único medio ─repuso él─ de rejuvenecerse, y esto lo desean todos».
Goethe

FAC QUOD FACIENDUM EST.
─‘Haz lo que debe ser hecho’─.

KWEN KHAN KHU