Pia Desideria, El alma, atada a un yugo

El alma, atada a un yugo, moviendo la piedra de un molino o almazara

El alma, atada a un yugo, moviendo la piedra de un molino o almazara 850 480 V.M. Kwen Khan Khu

Muy amados/as amigos y amigas:

Tomo la pluma para dirigirme a vosotros y, en esta oportunidad, para hablaros de dos grabados ─similares─ y que son originarios del libro Pia Desideria. En ambos se trata de…

…EL ALMA, ATADA A UN YUGO, MOVIENDO LA PIEDRA DE UN MOLINO O ALMAZARA

Esta temática del alma atada a un yugo es realmente muy remota, inclusive forma parte del castigo al que son sometidas las almas mientras están sujetas a la RUEDA DE LAS FATALIDADES o SAMSARA, propia de las teogonías tibetana e hindú. Ciertamente, hasta en las Sagradas Escrituras cristianas se menciona al caso del héroe SANSÓN, quien, habiéndose dejado seducir por DALILA, perdió sus fuerzas anímicas y físicas, llegando inclusive a perder la visión espiritual que lo hacía invencible ante los peligros de la existencia humana. Muy importante resulta resaltar que, en estos casos, la piedra que rota sobre un eje simbolizó siempre, esotéricamente, la sexualidad y el peso del destino.

En el presente grabado el alma está atada con unas cuerdas, a su vez sujetas a unas cadenas, que no la dejan escapar de su martirio, mientras que un individuo angélico cumple con la tarea de azotarla a causa de las diversas deudas que dicha alma ha acumulado en su existencia. Así actúa, queridos/as lectores/as, la Ley del Karma y sus Arcontes: persiguiéndonos aquí, allá y acullá para cobrarnos nuestros diezmos acumulados por nuestras malas acciones tanto cometidas en existencias anteriores como en la actual.

La presente ilustración va acompañada de una frase en latín que reza de esta manera:

«Vide humilitatem meam et laborem meum et dimitte universa delicta mea. Psal. 24:18».

Traducción:

‘Ve mi miseria y mi sufrimiento, y no consideres todos mis delitos o pecados’.

La anterior exclamación es la permanente súplica del alma a los Arcontes del Destino rogándoles misericordia y auxilio.

El alma, atada a un yugo, Pia desideria

En la variante en inglés, el grabado es más elaborado, veamos:

El alma, atada a un yugo, Pia desideria

En este otro caso, paciente lector, el grabado nos muestra todo un mecanismo que se pone en marcha justamente para castigar a las almas.

Tanto en el primer grabado como en el segundo, el alma castigada lleva sus ojos vendados, como una advertencia del estado de Conciencia dormida en el cual se encuentra, lo cual la lleva a la repetición incesante de sus propios errores. Nuestra ceguera, estimado lector, no nos permite ver la profundidad de nuestros errores y ello hace más adversas nuestras vidas.

El grabado va acompañado de una frase en inglés que nos dice:

«Look upon my adversity and misery, and forgive me all my sin. Psal. 25:17».

Traducción: ‘Mira mi adversidad y miseria, y perdóname todo pecado. Salmos 25:17’.

Traducción del comentario general sobre la imagen:

‘Gira a mi alrededor la pesada e incansable rueda, y descubro que mi tarea sin fin comienza todavía: dentro de este círculo, atado por una extraña magia, todavía estoy en movimiento, pero ningún terreno gano’.

Todo esto nos dice que, ciertamente, parece que nuestros karmas no terminen y que, a pesar de querernos salir de dicha trampa, no conseguimos ganar terreno para nuestra liberación. Gnósticamente, todos sabemos que la sola manera de abandonar nuestros karmas es aplicándonos los tres factores de la Revolución de la Conciencia y TRATANDO DE VIVIR PADECIMIENTOS VOLUNTARIOS Y SACRIFICIOS CONSCIENTES……..

Luego, sigue otro texto que nos dice:

‘Sin embargo, de mis cadenas no estoy tan cansado, sino que todavía me estoy poniendo otras. Porque el pecado siempre tiene esta maldición acompañante, para apoyar la primera transgresión con una peor. Y aunque vi la peste amenazadora desde lejos, no todo el peligro podría disuadir mi voluntad. Así, el vicio y la virtud dividen mi alma, como un barco hostigado entre viento y marea. El placer, la alcahueta del vicio, aquí me atrae. Allí, el dolor, su seguidor, me atrae de nuevo; sin embargo, el placer viene victorioso del campo, y hace que mi alma al vicio rinda su homenaje. El dolor hace con el vicio un paseo triunfal, colocado, como el esclavo, al lado del gran conquistador’.

‘Así, el vicio y la virtud dominan alternativamente, mientras que yo, con un trabajo sin fin, me someto a ambos, y para aumentar mis dolores, como si fueran demasiado pequeños, tu mano pesada viene por detrás de todos [la mano del karma] y, con golpes fuertes y penetrantes, corrige ese pecado, que en sí mismo había sido más que castigado. ¡Oh! Examina con piedad mi dolor, ¡y usa algunos métodos de alivio más suaves! ’…..

Ese es el terrible dilema en el cual se mueve nuestra Esencia, queridos amigos y amigas, y todo por falta de nuestra resolución.

Oremus…..

KWEN KHAN KHU