Muy amados/as lectores/as:
Me complace enormemente haceros llegar este documento que escribí hace bastantes años, cuando comenzábamos nuestra expansión doctrinaria. Lo hemos titulado…
…EL ENTUSIASMO MÍSTICO
- El místico entusiasmo es un ingrediente básico en la búsqueda permanente del SER.
- Tal entusiasmo nos abre las puertas de las ideas, los arquetipos superiores, la COMPRENSIÓN del trabajo gnóstico y la correspondiente continuidad de propósitos.
- Para encontrar el entusiasmo místico es necesario ante todo tener «ANSIAS DE SER», y dichas ansias se deben convertir en el resorte secreto de toda acción, pensamiento, deseo.
- El PESIMISMO es el enemigo fundamental del ENTUSIASMO MÍSTICO. Tal pesimismo es el producto de los innumerables pensamientos derrotistas, ayeres frustrados, proyectos no continuados, ambiciones no alcanzadas, etc. El pesimismo se alimenta día tras día, añadiendo subconscientemente a nuestra empobrecida psiquis nuevas recriminaciones de carácter fatalista y en un cien por cien DERROTISTAS.
- Cuando el devoto de una senda esotérica o metafísica se AUTOESTIMA demasiado, es presa fácil de los pensamientos derrotistas, ya que siempre estuvo «autoencerrado» en sueños de gloria, de poder, de fama, de prestigio, etc., aun en el terreno espiritual.
- El estudiante que aprende la técnica de la NEGACIÓN CONSTANTE de sí mismo, fabrica un escudo, un sello hermético ante el cual no pueden ni la alabanza ni el vituperio.
- Detrás de toda vanagloria existe un falso entusiasmo místico que no procede del SER sino más bien de los deseos de poder, de protagonismos o EGOCENTRISMOS característicos de la mente cazadora.
- El auténtico ENTUSIASMO MÍSTICO es profundo y no reclama reconocimientos exteriores por parte de los demás, sino que se regocija en su propia dicha interior y se cubre muchas veces con el ropaje del silencio.
- Es necesario comprender que todo pensamiento o deseo de carácter pesimista tiene tres etapas de funcionamiento:
- a. APARICIÓN DEL PENSAMIENTO en sí a causa de una impresión desagradable no transformada
- b. Conexión de tal PENSAMIENTO con otros estados anímicos afines a su naturaleza, por ejemplo: recuerdos de situaciones similares acaecidas tiempo atrás, amor propio herido por esta nueva impresión, sentimiento de culpabilidad, de incapacidad ante los otros, etc. En este momento es cuando este manojo egoico se torna más fuerte y busca proyectarse en la acción a través de palabras, golpes, signos de angustia en el rostro, desagrados, anhelos de suicidio, etc., etc. Por lo común, toda persona entrega sus fuerzas, voluntad y firmeza a esta representación mental y, como consecuencia inevitable, da por realidad lo que en el fondo es una tremenda IRREALIDAD.
- c. DESAPARICIÓN PAULATINA del control del YO sobre nosotros después de habernos succionado las energías de nuestra máquina orgánica. Posiblemente, si no nos hemos identificado mucho con tal manojo de agregados psíquicos, es de todas maneras reemplazado por otras impresiones aparentemente más interesantes.
- Lo más importante es, ante todo, reconocer frente a un estado pesimista la banalidad de todo lo que acaece en torno a eso que llamamos VIDA.
- Reconocer profunda y constantemente que solo posee REALIDAD SUPREMA eso que llamamos EL SER. Esto significa, asimismo, negar absolutamente toda importancia a lo que normalmente se le atribuye valor exagerado o es insubstancial.
- De este reconocimiento brota, poco a poco, el amor primordial hacia lo divinal, y en la búsqueda de eso que es divinal van tomando otra naturaleza las palabras, los pensamientos, las acciones, los anhelos, y se comienza a sentir una auténtica metamorfosis interior y exterior en el devoto.
- Así, el entusiasmo místico se va nutriendo con la fuerza de los hechos, y es esta fuerza primaria la que realmente va constituyendo la ética superior y la voluntad suprema del aspirante a la Luz.
- Podemos entonces resumir:
- a. No existe ENTUSIASMO MÍSTICO si no hay anhelos de Ser.
- b. El verdadero ENTUSIASMO MÍSTICO no es exterior sino interior, aunque se refleja en la continuidad de propósitos.
- c. El MÍSTICO ENTUSIASMO se mantiene y se nutre cada día con la constante transvalorización de la enseñanza practicada por el aspirante.
- d. El auténtico ENTUSIASMO MÍSTICO se extrae de la firmeza que podamos mantener ante el huracán de la ilusión egoica.
- Con el ENTUSIASMO MÍSTICO aceptamos todo proceso al que tengamos que ser sometidos.
- Vivir en plenitud significa mantener el corazón, la mente y nuestra máquina orgánica atados al CARRO del ENTUSIASMO MÍSTICO. Esto es posible no perdiendo nunca de vista el factor capital por el cual vinimos a la existencia y el cual viene a ser dejar de ser EGO para LLEGAR AL SER.
- En el constante acecho íntimo de nuestros funcionalismos mentales, descubrimos la tremenda fuerza del EGO trabajando desde dentro, buscando siempre de nosotros el abandono del REAL CAMINO.
- El Hombre real es el fruto de la tremenda determinación de renunciar a sí mismo para integrarse en lo divinal. Esta renuncia implica muchas cosas:
- a. A sus conceptos ordinarios y mecánicos.
- b. A su prestigio de «sabelotodo».
- c. A ser el centro de su hogar, oficina o círculo de amigos.
- d. A los valores de su personalidad.
- e. Al exceso de confianza en sus posesiones materiales.
- f. A la autojustificación egoica, ya sea verbal, mental o de acción.
- Ahora podemos comprender por qué, dentro de una aparente ausencia de bienes y comodidades materiales, muchos místicos alcanzaron sus metas, consiguiendo no solo elevarse espiritualmente, sino llegando inclusive a levitar físicamente. Esto era producto del infinito ardor místico que los consumía íntimamente, factor este conectado al desarrollo del chacra cardíaco.
- En este fluir del ENTUSIASMO MÍSTICO TRASCENDENTAL, el SER despliega sus diferentes vertientes energéticas, y el místico se hace poeta, filósofo, artista, religioso y científico. HE AQUÍ AL SUPERHOMBRE EN ACCIÓN…..
Os hago llegar ahora unas frases que considero interesantes para reflexionar, veamos:
«El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente».
Alonso de Ercilla
«El valor cristiano consiste en desdeñar la muerte, el valor chino consiste en desdeñar la vida».
Chesterton
«Una libra de valor vale más que una tonelada de suerte».
Bretón de los Herreros
«El verdadero valor no busca los peligros, los afronta».
Plutarco
«La mejor parte del valor es la discreción».
Shakespeare
VIVERE MILITARE EST.
─‘Vivir es luchar’─.
KWEN KHAN KHU