La Kábala gnóstica funciona, a diferencia de lo que han mostrado muchos tratadistas que han intentado ahondar en este tema, en base a cifras o números que en sí mismos engloban un significado secreto ligado a la eternidad. Como bien afirmara Pitágoras, el número es sagrado porque participa de la infinitud. Por otra parte, estos números, unidos a imágenes arquetípicas milenarias, constituyen entonces un binomio metafísico que arroja un significado cada vez que el devoto consultante quiere una respuesta a sus inquietudes brotadas de sus ansias de saber aquello que pertenece a la relación de su alma con su Espíritu divino.
Está dicho por el V.M. Samael Aun Weor, padre de la Gnosis contemporánea: resulta absurdo convertir a la Kábala en algo intelectual, frío, meramente racional, pues ella, junto con la Alquimia, son las columnas torales que sostienen el templo de la Autorrealización Íntima del SER de la Filosofía Hermética.
Partiendo de esta premisa, el lector habrá de despojarse de sus preconceptos, prejuicios y dogmas adquiridos a lo largo de su vida, cuando intente llegar a las profundidades que ofrece esta apasionante lectura.
Asimismo, nuestro caro lector podrá disfrutar de innumerables prácticas que acompañan cada capítulo del presente tratado, con todo lo cual su lectura no quedará como una ojeada a una serie de teorías, sino que irá descubriendo los entretelones prácticos de todo lo que aquí se está afirmado.
Esta obra, amigo lector, es el fruto de una mente iluminada, conectada a los estratos más elevados de la espiritualidad, y por ello está hecha para poner en marcha las facultades secretas que bullen en los corazones de todas las humanas criaturas que siempre han querido acercarse a la luz para jamás separarse de la misma.
Kwen Khan Khu
«Los seres humanos tienen una necesidad religiosa, pero dicha necesidad no se refiere a una creencia religiosa, sino más bien a una experiencia religiosa. Esta experiencia es un fenómeno psíquico que tiende a la integración del alma y, por ende, representa el funcionamiento de la psique como un todo.
La religión es el reconocimiento de las realidades superiores que la consciencia no consigue reconocer, y transferida a lo psicológico, genera la unidad interior y la integridad del ser humano. Este objetivo –que los antepasados espirituales de Jung de los primeros siglos cristianos llamaron Gnosis– no se alcanza creyendo en determinadas ideas sino solo a través de la experiencia».
–Extracto de la obra Jung el gnóstico, de Stephan Hoeller–.