Acuéstese en forma de estrella, abriendo piernas y brazos a derecha y a izquierda.
Concéntrese ahora en sus propias necesidades físicas inmediatas.
Medite, reflexione en cada una de esas necesidades.
Adormézcase tratando de descubrir por sí mismo dónde termina la necesidad y dónde comienza la codicia.
Si su práctica de concentración y meditación interna es correcta, en visión interna descubrirá cuáles son sus legítimas necesidades y cuáles son codicia.
Recuerde que solo comprendiendo profundamente la necesidad y la codicia podrá usted establecer cimientos verdaderos para el correcto proceso del pensar.
Samael Aun Weor
Introducción a la Gnosis (capítulo 5)