Este grabado representa la decadencia de la humanidad sumida en el desorden absoluto, un nivel muy bajo del ser, la vanidad. Todo esto conduce a la decadencia de la humanidad sumida en el desorden absoluto, la vanidad… conduce a la estupidez, a la entropía total. La riqueza permite la estupidez y la entropía total.
El autor de este grabado fue Hieronymus Wierix. La sabiduría está en las tres fuerzas de la creación: Padre, Hijo y Espíritu Santo; condensadas en nuestras energías creadoras.
Este hermoso grabado nos muestra que nuestra redención solo es posible mediante el auxilio de la cruz.
Estos grabados representan al Dios Hércules Gálico, quien es el paralelo del Heracles griego y del Hércules romano.
Este hermoso grabado nos muestra ante todo la grandeza de buscar el camino del Cristo íntimo. Al mismo lo vemos dentro de una nube enseñando a un devoto el globo, que representa el caos espermático, coronado por una rama de laurel, símbolo, asimismo, del triunfo hermético.
Para comenzar nuestra descripción diremos que, si observamos el centro de este grabado artístico, apreciaremos inmediatamente la figura de Satán sentado sobre la esfera que representa nuestro mundo, y ello es para mostrarnos que, ciertamente, él es el que, por desgracia, rige los destinos de este hormiguero humano.
Os hago llegar ahora el segundo grabado de la secuencia de cuatro en total realizados por el artista flamenco Gérard Van Groeningen en el año 1573. Esta es la serie de grabados englobados con el título Las cuatro formas de vivir en la tierra.
Empero, ¿a qué nos referimos cuando tratamos esto del ESTADO DE GRACIA? Sin lugar a dudas nos referimos a la búsqueda de la salvación de nuestra alma o de los valores que a ella atañen, eso es estar en estado de GRACIA.
Hemos de saber que esta ilustración fue obra del gran místico alemán llamado Jacob Böhme. Este grabado es la portada de una obra del mencionado autor y los editores le hicieron a Jacob Böhme 177 preguntas teosóficas, de las cuales el autor contestó 15.
El grabado en cuestión fue elaborado por Jakob Böhme ─1575-1624─ en una de sus obras póstumas.Para muchos de los investigadores este libro es considerado uno de los más difíciles de sus escritos.