A través de la Gnosis hemos llegado a saber, dentro de la Kábala doctrinaria, lo que representa para nosotros los gnósticos eso que llamamos el Árbol Sephirótico, con todos los desdoblamientos que del mismo se desprenden y que se corresponden con diversas partes sacratísimas de nuestro SER.
Por orden del santísimo Theomegalogos, en la aurora de la creación, los Elohim se polarizaron, masculino y femenino, realizaron un acto de Magia Sexual purísima y con palabras de poder, mantras fueron dando forma a las diversas dimensiones del espacio sideral.
Según los historiadores, se trata de una obra de carácter teosófico que contiene diversos temas de filosofía natural y esoterismo, tomando elementos de la Kábala y el Hermetismo. Transmite la idea de que los secretos de la naturaleza solo se revelarán a aquellos hombres de buen corazón.
Primeramente, apreciado lector, hemos de decir que esta ilustración aparece en el libro titulado Studium Universale, escrito por Valentín Weigel, quien era filósofo, escritor, místico alemán de Sajonia y, según algunos, un precursor de la Teosofía.