El personaje que entrega su corazón es el llamado mundo necio ─la humanidad en general─, quien, además de tener su psiquis siempre embotellada en diversas estupideces que le proporciona la ilusión mayávica, lleva unas gafas tratando de corregir su miopía, empero de nada le sirven.
El V.M. Samael siempre nos insistió en la necesidad de romper con el implacable destino que nos lleva siempre a cumplir estúpidamente con la mecanicidad con la cual se nos manipula de existencia en existencia. Esta lucha está planteada en la llamada Revolución de la Conciencia, con sus tres factores bien definidos en nuestra doctrina…
Este grabado, amigas y amigos, aparece titulado en la parte superior del mismo con estas palabras: «EL ESTUDIO ES LA CAUSA DE LA TRANQUILIDAD».
Empero, gnósticamente hablando, mejor sería titularlo «LA MEDITACIÓN Y LA ORACIÓN SON LA CAUSA DE LA TRANQUILIDAD».
«Visita el interior de tu tierra filosófica que rectificando encontrarás la piedra oculta’ — la Piedra Filosofal ─ es el camino hacia la Autorrealización Íntima del Ser. Así es la enseñanza de este grabado que lleva por título «La recompensa del trabajo y la diligencia».