¿Por qué el Ser se expresa siempre con presentimientos o intuiciones?

¿Por qué el Ser se expresa siempre con presentimientos o intuiciones? 850 480 V.M. Kwen Khan Khu

Muy queridos amigos y amigas:

Me complace escribiros unas líneas para exponeros algo que merece nuestra atención. Me refiero, sin ambages, a:

¿POR QUÉ EL SER SE EXPRESA SIEMPRE CON PRESENTIMIENTOS O INTUICIONES?

Para empezar diremos que no siempre el SER es quien ha guiado determinados objetivos ─mediante ideas─ que han formado parte de nuestro destino o de ese otro que corresponde a la humanidad…, pues una cosa es la mente y sus diversas creaciones, buenas o malas, y otra cosa es eso que llamamos INTUICIÓN O PRESENTIMIENTO

Ya la gran Dama Adepto Helena Petrovna Blavatsky habló en su Doctrina Secreta acerca de LA VOZ DEL SILENCIO. Esa frase, aunque parezca una contradicción, tiene una enorme profundidad, porque tal voz alude al mensaje que en un determinado momento de nuestra vida nos quiere hacer llegar el SER, ya sea para evitarnos alguna calamidad o para hacernos entrar en algo trascendental para nuestro Espíritu o nuestra vida en general.

Los mismísimos libros sagrados de toda auténtica religión siempre han sido escritos gracias a la prudente voz del Padre que está en secreto para dejar un legado divino a la posteridad. De este modo, la inspiración de aquellos que han desarrollado libros como La Biblia estuvo otorgada por el SER INTERIOR PROFUNDO, quien, a su vez, se valió de la fuerza iluminadora del Espíritu Santo… Los escribas de los libros herméticos han sido individuos que estaban a la altura de poder escuchar o sentir lo que el Padre les estaba revelando, para hacernos saber a todos las vivencias místicas que habían tenido determinados mártires, santos, profetas, avataras, guías, manús, etc., etc., etc.

Es por eso que existen libros sagrados en Oriente y Occidente porque, independientemente de los idiomas desatados sobre la humanidad a raíz de la pérdida de la LENGUA DE ORO, de todos modos, a través de la historia, Dios ha revelado sus misterios a todos los pueblos de nuestro mundo y en determinadas épocas.

A medida que cualquier persona va eliminando sus agregados psicológicos ─léase: defectos─ y va llenando su estructura anímica de fuegos ─alquímicos─, entonces se va acercando más y más a la naturaleza del SER. Y si logra desintegrar todos los diez mil agregados que componen a nuestra Bestia interior, entonces se convertirá en substancia SER, es decir, será UNO CON EL MISMO SER. Cuando esto ocurre el Iniciado solamente siente, a cada instante, la VOZ DEL PADRE, y el mismo Adepto obedece esa voz interior tanto para enseñar el mensaje de su Espíritu divino como para asuntos personales de índole particular.

Esta intuición de la que hablamos aquí recibe en Oriente el nombre de PRAJÑA-PARAMITA y nuestro Venerable Patriarca llegó a poseerla, cosa de la cual quien estas líneas escribe da testimonio. En muchas ocasiones, caro lector, un servidor quiso preguntar al V.M. Samael determinado asunto relacionado con equis materia, y mucho antes de hacer mi pregunta el Patriarca me daba la respuesta. ¡Era algo realmente sensacional! Este fenómeno ocurrió en muchas oportunidades y, particularmente, a mí me producía siempre asombro, profundo asombro…

Personajes como Michel de Nostradamus elaboraron sus famosas CENTURIAS PROFÉTICAS escuchando y viendo aquello que el SER les hacía PRESENTIR, INTUIR o, a veces, INTUIR Y VER A LA VEZ, todo un regalo para aquel gran vidente. Igualmente sucedió con el famoso Edgar Cayce, quien era capaz de PRESENTIR O INTUIR claramente lo que estaba pasando a determinada persona a miles de kilómetros. Cayce se hizo famoso por acertar, inequívocamente, lo que de hecho pasaba a determinadas gentes que estaban enfermas y a quienes la ciencia médica de su tiempo daba por descartadas o INCURABLES. Cayce les decía la verdadera causa de su enfermedad y cuál era la sabia medicina que lograría el milagro de la curación a muchísimas personas. Aún existe, en los Estados Unidos, el famoso INSTITUTO EDGAR CAYCE, hoy convertido en una institución de caridad…

La INTUICIÓN O PRESENTIMIENTO es una de las posibilidades, entre miles,  que nuestro SER posee para orientarnos cuando Él lo considere necesario y, obviamente, cuando los méritos de nuestro corazón así lo permitan. Es por ello que la palabra del Padre es silenciosa, pues habla mediante presentimientos o INTUICIONES. Lo que es importante saber aquí, ínclito lector, es que, a diferencia de lo que la mente nos puede indicar en un momento determinado y terminar siendo luego una mala orientación, la INTUICIÓN O PRESENTIMIENTO del SER jamás se equivoca, jamás, jamás. ¿Por qué? RESPUESTA: ¡Porque el SER es una fracción de Dios en nosotros y Dios no pertenece a la relatividad sino a lo ABSOLUTO!, esa es la diferencia……

Hemos de enfatizar que la intuición es directa, certera, inequívoca. Muchas damas han sentido la voz del Padre hablándoles en su corazón advirtiéndoles, claramente, de NO ENTRAR EN RELACIÓN CON DETERMINADO VARÓN para no arruinar sus vidas, pero los Yoes del deseo han sido más fuertes y han bloqueado aquella advertencia. Más tarde en el tiempo, aquellas mujeres han sufrido lo indecible con aquel hombre con el cual se desposaron y siempre han recordado que, si hubieran hecho caso a LA VOZ DEL CORAZÓN, todos aquellos sufrimientos morales o físicos no hubieran tenido lugar en sus vidas. He aquí el precio que pagamos por estar controlados por nuestro pésimo secretario al que llamamos EGO ANIMAL. El YO no sabe amar realmente, el YO solo sabe DESEAR.

Cuando Leonardo da Vinci realizó la obra magna que hoy llamamos LA GIOCONDA, siguió la voz del corazón para hacer los trazos magistrales con su pincel, y consiguió dejar a la posteridad nada menos y nada más que la foto de su Divina Madre, todo un acontecimiento trascendental y divinal…

Igualmente, estimado lector, el famoso libro llamado I CHING, compuesto por hexagramas matemáticamente colocados en sus páginas, jamás fue el fruto del intelecto pero sí de la intuición. Igual sucede con los MANDALAS del Budismo oriental, pues son mensajes reveladores que hablan directamente a la Conciencia sin necesidad de la intervención de la mente y sus cacareados cuarenta y nueve niveles habitados por el EGO.

Una de las consecuencias derivadas de la experimentación del VACÍO ILUMINADOR es, justamente, que tal experiencia deja la psiquis del experimentador conectada a la intuición del SER. Entonces es obvio que, para el devoto, la visión del mundo, de la vida y de la muerte cambia radicalmente, pues su naturaleza anímica ya no está sujeta los vaivenes de la mente sensual o a las contradicciones de la mente intermedia: su mente queda unida a la mente interior. Ya sabemos que la mente interior es como un espejo en el cual se reflejan las verdades trascendentales de nuestro Padre que está en secreto, y es de esta manera como vamos comprendiendo y vivenciando los misterios de nuestro SER. Abandonamos el mundo de las especulaciones y teorías para entrar en el reino de las percepciones directas de lo divinal, algo muy diferente.

Empero, no nos engañemos, para llegar a estas cumbres de nuestro camino espiritual hemos de despojarnos del lastre que arrastramos en nuestras profundidades. Ese lastre es el fruto de nuestras miles y miles de fornicaciones tanto de nuestras vidas pasadas como de la presente existencia que tengamos. Tal lastre hay que desintegrarlo mediante PADECIMIENTOS VOLUNTARIOS Y SACRIFICIOS CONSCIENTES y con la ayuda del FUEGO SAGRADO DE STELLA MARIS. He allí la fórmula para abandonar el estúpido mundo de las ilusiones que componen a la Rueda del Samsara.

Esa es la importancia de cerciorarnos de realizar en nosotros UNA MUERTE PSICOLÓGICA EFICAZ. Cuanto más profunda sea nuestra muerte interior, más lúcida será nuestra psiquis y mantendremos la conexión con el Reino de la Verdad a través del gran poder de la INTUICIÓN.

Os dejo ahora unas frases para vuestra reflexión:

«La intuición es una concepción no dudosa de la mente pura y atenta que nace de la sola luz de la razón [objetiva]».
Descartes

«Me figuro que la intuición no es solo una adivinación caprichosa y sin base, sino más bien un juicio que, en vez de basarse en la mayor parte de los caracteres esenciales de una idea o de un acto, se apoya en uno solo que encuentra significativo».
Pío Baroja

«Ningún hombre ha llegado a ser grande sin un toque de divina inspiración».
Cicerón

«Todo número es cero delante de lo infinito».
Victor Hugo

NE LA TERRA NE IL CIELO VIST HA PIU BELLA.
─‘Ni la tierra ni el cielo han visto otra más bella’─.

QUE LOS EFLUVIOS DE LA VERDAD INUNDEN VUESTROS CORAZONES ETERNAMENTE.
Kwen Khan Khu